Vivian Sleiman: virgen a los 31
Escrito por Iván R. Méndez | X: @ivanxcaracas   
Miércoles, 30 de Noviembre de 2011 10:32

altHace un par de semanas arribó a los 31 años la espectacular Vivian Sleiman: pintora surrealista, especialista en Marketing de Only Tickets, locutora,  vidente, modelo, profesora

de spinning y, recientemente, autora publicada por Editorial Planeta Venezuela con el volumen “Virgen a los treinta” que debutó con 8.000 ejemplares.

Bajo los parámetros convencionales no se titula un trabajo con la edad de la entrevistada y, menos aún, con su estatus sexual… Pero es que la libanesa-venezolana Vivian Sleiman entrega un potente manifiesto postmoderno sobre su decisión de mantenerse virgen a pesar de atravesar, a lo largo de su vida, un campo minado de deseos, escarceos amorosos (más de 20) y expectativas no realizadas… El reverso  del libro es su denuncia del machismo coital que se nutre de una aritmética de cuerpos marcados con un √ en su libreta del Blackberry.

Vivian asegura que “este libro lo pueden leer todos los mayores de 14 años, los va a atraer por diversas cosas. Pero le hago llamado a los muy jóvenes: ¡ey! calma , paciencia”.  

altLa obra tiene diversos accesos: la Vivian irreverente que grita su posición al mundo, la Vivian “emo” frustrada y molesta por los machos himen-céntricos, la Vivian mística que convive con ángeles protectores, la Vivian reality-show que nos detalla sus amoríos con el piloto, el pelotero famoso al que le encantan los dulces, los innumerables árabes que le buscaron para casarla; lo que si tiene este volumen es una sola puerta de salida, pues una vez que lo empiezas no hay manera que lo sueltes.

Nación virginidad

“Virgen a los treinta” encaja en ese derrotero que explotó Elizabeth Wurtzel en los noventa con su “Nación Prozac”, donde depresión, furia y un lento proceso de reinvención les permitió, a las dos, desembocar en escritoras…  La obra de Sleiman es conversacional e informal como un blog, y es que así se inició, pero luego lo desactivó y decidió reescribirlo,  estructurarlo y plasmarlo en papel.

“Virgen a los treinta”, sus tensiones, paradojas, histeria (dirán los psicólogos) y bifurcaciones se resumen en este párrafo. “En mis gritos de libertad pido clemencia a las almas que valientemente luchan por la vida, por sus convicciones, sean cuales sean, simplemente pido respeto, respeto a los gays, respeto a los heterosexuales, respeto a los vírgenes, respeto a la humanidad, sencillamente eso, respeto”…

Venezuela es un país de mujeres vírgenes y no son sólo libanesas o sirias… Hay señoritas venezolanas que nunca accedieron a las peticiones carnales u otras que se encaminaron por la vía de los votos religiosos, ¿por qué no escogiste el silencio calmado de la “tía solterona”  o la sublimación mística de las monjas, a pesar de tus episodios  metafísicos sino una tercera vía, la del grito, el manifiesto o la  reafirmación sensual pues eres hermosa y no dudas en mostrarte en traje de baño a través de fotos que envías de tu celular o publicas en Twitter?

Vivian Sleiman: Sabes, sonrío porque te confieso que en algún momento quise meterme a monja, estaba cansada que me dijeran ‘qué bella eres pero no quiero hacerte daño’, sentía como si mi virginidad era un obstáculo, en el camino desistí de ser monja y tomé este camino del grito...

“Virgen a los treinta” es una denuncia, un llamado de atención, una necesidad de liberarme y gritarle al mundo que en muchas oportunidades me he sentido presa de mí misma y de los hombres que me han condicionado a ser virgen. Me he sentido como el trofeo preciado para ellos. La elaboración del libro fue una catarsis. Hace 10 años sabía que tenía que escribirlo.

@ivanxcaracas: ¿Por qué un manifiesto para reclamar tu derecho a seguir siendo virgen? Escribes: “esta ha sido mi necesidad de gritarle al mundo, a susurros, que no estoy loca, que soy normal, que sencillamente me encanta un hombre… pero que sólo me entregaré por amor”


Vivian Sleiman: Es un llamado de atención hacia el respeto. Antes de publicarlo me pregunté por qué lo voy a publicar, por qué otros no lo hicieron antes. Si ya se ha hablado del homosexualismo, del SIDA, del cáncer, por qué nadie ha abordado la virginidad, es el último tabú. A mí me encanta un hombre, me fascina, tengo las hormonas a flor de piel. No soy frígida y no hace falta no ser virgen para saberlo. Con sólo un beso puedes sentir mil cosas.

@ivanxcaracas: ¿Por qué consideras que hay “pureza” en mantenerte virgen?


Vivian Sleiman: La virginidad no es solamente una tela blanca, viene en pensamientos, en pureza. Puedes tener intimidad con tu novio. Nunca me propuse llegar virgen a los 30, he estado a punto de entregarme, pero entonces siento el amor mío, pero no el de esa persona con la cual estoy, no siento el  amor sincronizado de ambos, dos cuerpos en uno. He tenido intimidades con la última persona (Nota del entrevistador: un pelotero grandeliga al que le encantan los dulces) que cuento en el libro, pero no hubo penetración, en ningún sentido, en ningún lado,  abiertamente te lo digo.

El himen no tiene religión, credo, nada… Si me preguntas si creo en los príncipes azules, te digo que sí, no puedo vivir sin magia, sin fantasía.

@ivanxcaracas: ¿Cómo fue el proceso de comunicar este libro a tu familia? no sólo eres una mujer que asume confesar y defender su “virginidad en transición” sino que eres descendiente de libaneses, una comunidad que apuesta por el ocultamiento de este tipo de cosas?

Vivian Sleiman: Yo escribo y pinto al oleo desde los nueve años. Siempre me ha gustado Dalí y he replicado sus cuadros surrealistas. A los 18 mis hermanos sabían que yo estaba contando mis experiencias en mi blog, pero era privado, sólo lo leían algunas amigas, algunas son bellísimas y también vírgenes, otras ya se casaron con el hombre que esperaban. Desde adolescente tuve  depresiones fuertes y me encerraba a pintar o a desahogarme en mi blog. Tanto mi mamá como mis hermanos siempre, siempre, me dieron su apoyo. Aunque al ver que mencionaba a personas que conocemos, me preguntaron si estaba segura, les respondí  que sí y lo aceptaron. Pero te confieso, a lo largo de mi vida  el proceso fue duro, toqué fondo. Pero escribir para mí fue la parte más gozona, sólo cuando supe que iba a salir me dio mucho ansiedad. Ahora me siento resurgida,  como el Ave Fénix, y me siento una mujer con templanza y segura de  qué Dios está conmigo.

Amor virtual
Emails, cinco meses de llamadas telefónicas que duraban toda una madrugada, un iPod anaranjado cargado de música latina, fotos y un video, conformaron el universo amoroso de Vivian con su “novio” pelotero del “apodo acaramelado”, con quién se encontró y jugueteó en Aruba (su mamá fue su chaperona en esa aventura)… Su aparición a mitad de obra, la gira hacia  una suerte de réplica a ese jugador, ¿Es como si al desconectarte de su PIN, aún querías decirle otras cosas, ¿es así?

Vivian Sleiman: No, ese capítulo está cerrado. Le doy más énfasis a este personaje porqué fue la relación más dura, no porqué él sea famoso. Muchos no entienden las relaciones virtuales,  hasta  las cuestionan. Yo pasaba madrugadas con él, esperaba que saliera de los juegos. Se puede  saber como es otra persona a través del teléfono, no te intimida pues no la tienes al frente. Pero si hoy me preguntas  si haría lo mismo, diría que no, porqué realmente no conoces a la persona hasta que convives con ésta, lo hice y fue un shock porque no era la misma del teléfono.

@ivanxcaracas: En “Angosta”, el escritor colombiano Héctor Abad  define al  sexo así: “El eso es eso: mil batallas vencidas para al final perder la guerra. Mejor dicho, la guerra es imposible de ganar, la guerra consiste en esas batallas que se suceden una tras otra y nada más" …  Cita que de alguna manera define tus entradas y salidas de relaciones…

Vivian Sleiman: No veo al amor como una competencia, no es lo que busco, si estoy con él es para trabajar en equipo, para apoyarlo, para mí la pasión es un acto de comunión.

@ivanxcaracas: aseguras que has pasado tu vida huyendo de los patanes, pero falta que quieras huir de algo para que este algo te persiga… En realidad, Vivian, al leer tu libro uno siente que tú buscas un perfil reiterativo,  lo cual encaja con la teoría del psicólogo José Antonio Marina, quien asegura que tenemos una personalidad sentimental… ¿Cuál sería la tuya?

Vivian Sleiman: es cierto, repito a tipos no tan normales, como dicen mis amigas…¿Mi personalidad? Soy una persona fuerte, sensible, arriesgada, atrevida, pícara y luchadora, cuando quiero algo  nadie me lo quita de la cabeza. Mi filosofía amorosa es que alguien fuese perfecto sería aburrido.

¿Arrepentida?

@ivanxcaracas: aunque aseguras que “llegar virgen a los treinta no ha sido una condición, no ha sido una obligación, es una eterna convicción” en sus página asistimos a un lucha interna, a un arrepentirte y decirte que mejor la hubieras perdido a los 18… ¿Qué Vivian gana? Y Si pudieras ir atrás, lo habrías hecho con alguno de esos 20 pretendientes…

Vivian Sleiman:  No cambio ni un sólo vida de mi día hasta ahorita, se aprende de las lágrimas y alegrías, de las caídas. Hoy soy una Vivian madura, fortalecida, sin rencor, sin odio. Frustración si hubo en mí, como mujer, porqué no me tomaban en cuenta, el hombre ha perdido la esencia de enamorarte, el arte de la seducción, hay que regalarles un diccionario de seducción

altVirgen + mística
Esta obra no se agota en el manifiesto pro virginidad ni su tono es uniforme, pues el drama deviene en picardía y, en diversos párrafos, en acidez extrema.  A veces se desvía por derroteros místicos, como la aparición de un “Ángel” que asegura Vivian la protege y le habla (o hablan, pues son varios) y casi al final ella coloca un pasaje un tanto inquietante, que reproduzco tal cual: “deberíamos aprender de los extraterrestres, al menos esos seres se comprenden con la luz de sus ojos, y con un chip se pasan la memoria de latitud a latitud”, ¿qué quieres decirnos con eso?...Sobre lo místico, no lo muestras misterioso, sino cordial, como si tú misma vivieras admirando el misterio de existir, ¿es así?

Vivian Sleiman:  No he visto extraterrestres, eso fue sólo una forma de expresar lo que sentía… Mi vida ronda en torno a la espiritualidad, un misticismo que no me deja, si intento alejarme, ellos no me dejan, me cuidan.
Todo el mundo debería desarrollar su sexto sentido y meditar, con sólo cinco minutos de meditación se pueden visualizar cosas bellísimas.  Mi próximo libro, pues ¡Planeta me dijo que serían varios! Será sobre Misticismo, una novela mística.

“Virgen a los treinta” genera conexión automática con el  lector, pero en cada uno el asombro o la inquietud serán distintos. Mi sobrina de 17 años, @miamendezz, tomó el volumen, vio la foto de Vivian en portada y afirmó, “pero si es una mami, ¿por qué sigue virgen?; mientras que DG, una comunicadora que ronda los 38 sentenció, “esta obra es Caracas, sus personajes tan originales y extraños, lo que nos hace únicos”, aseveración que confirmó Boris Izaguirre al presentarle a Vivian durante el lanzamiento de su novela “Dos monstruos juntos”, “eres la Virgen de 30, ya me habían hablado de ti” y la abrazó...

Contenerse como valor
En pleno siglo XXI, esta mujer de 1.75 y medidas tan perfectas que Osmel Sousa intentó reclutarla para su fábrica de mises, decide manejar su vida a su propio ritmo y asume el contener sus pulsiones (freudianas, jungnianas, lacanianas) como un valor, “no te diré que estoy en el Nirvana, pero sí en sus escalones, nadie me va a mover de mi templo, porque mi cuerpo es un templo”.


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