Tenemos que conformar un movimiento ciudadano que siendo mayoría ejerza su voluntad democráticamente en las urnas electorales este 6 de diciembre. 

El madurismo viene cuesta abajo y ellos lo saben muy bien. Las encuestas que circulan por los medios digitales y tradicionales demuestran un sentimiento de cambio que se respira cotidianamente en todos los rincones de Venezuela. 

Y todo esto asusta a un grupo de dirigentes políticos que desde hace 16 años han usufructuado  el poder para su beneficio personal y grupal. 

Les da pánico saberse derrotados  por la voluntad del pueblo democrático de Venezuela, porque ellos saben que la deben, y por ende la temen. 

Los incidentes internacionales que han involucrado a varios representantes del régimen, siendo el más reciente de todos, el protagonizado por Tarek W. Saab en México,  quien fue detenido por poseer una orden de captura de la Interpol, demuestra que dentro del socialismo del siglo XXI el que menos parece tiene su deuda pendiente. 

Las cuentas pendientes que tienen con la justicia internacional es uno de los motivos que producen en el oficialismo las violentas reacciones que lo ha caracterizado desde hace mucho tiempo. 

Las constantes acusaciones de los nexos de personeros del Gobierno con organizaciones paralegales e ilegales, con agrupaciones violadoras de la ley, parecieran que poseen mucha veracidad a ser comparadas con los hechos y percances que se han visto en los últimos tiempos. 

Recordemos, en este punto, lo vivido con el hoy candidato a diputado por el Psuv en Monagas, el “Pollo” Carvajal en Aruba. 

Lo cierto es que diariamente los representantes del madurismo dejan muy mal parada a nuestra Venezuela en el mundo. 

Ante esta cadena de sucesos los ciudadanos debemos enfocarnos aún más en la meta precisa de alcanzar una aplastante mayoría en la Asamblea Nacional que nos permita renovar y democratizar los poderes públicos, y promover soluciones  a la crisis producida por un método de Gobierno por siempre fracasado y agotado. 

Los nuevos diputados democráticos de la Asamblea Nacional vamos a tener la responsabilidad de elegir hombres y mujeres probos, sin tachaduras, en las diferentes instituciones para así lavar el rostro de nuestra institucionalidad maltrecha y descolorida. 

Y para alcanzar esto ¿qué debemos hacer? Debemos salir a votar para así botar del gobierno a aquellos que la deben y la temen, por las innumerables tropelías, abusos y hechos ilegales que han realizado a lo largos de todos estos años. 

@KarensRojasm