La política del terror, el amedrentamiento y las amenazas de enfilar todo el poderío maquiavélico del Ministerio Publico, la Contraloría, los tribunales al servicio del régimen y hasta de colocar una cámara paralela, fueron las armas “persuasivas” que utilizaron los “patriotas revolucionarios” para humillar a los colegas concejales Jesús Salazar y José Martínez Romero.

Como todos sabemos la semana pasada se eligió la nueva junta directiva del Concejo Municipal de Bruzual y para sorpresa de la macolla del PSUV, dos de sus ediles lograron alcanzar los escaños, pero con el apoyo de los votos opositores; las reacciones no se hicieron esperar, llamadas del Prof. Aristóbulo Izturiz, visitas permanentes de diputados del parlamento regional y del Secretario de Gobierno, Rafael Vega, pero la acción mas denigrante en perjuicio de estos concejales bolivarianos, la ejerció el mismísimo alcalde del municipio, quien se jactaba diciendo que los desconocería como directiva.

De verdad que no quiero estar en el pellejo del "Negro Chávez" a quien le debo respeto a pesar de la diferencia política, pero los hombres únicamente se deben humillar ante DIOS TODOPODEROSO y no ante cualquier basura politiquera.

En los cuatro años que llevamos en el ejercicio parlamentario, nunca he votado a favor de la gestión del alcalde, porque existen elementos suficientes que evidencian hechos de corrupción, de igual forma las concejalas María Vielma y Evelin han improbado en dos oportunidades, pero el concejal Jesús Salazar se ha rasgado las vestiduras defendiendo a capa y espada el gobierno del Ingeniero Canache, aprobando cuanta solicitud y cuentas presente el burgomaestre, guardando lealtad en todo momento, incluso en lo irregular, y le paga con una puñalada trapera por la espalda, a fin de cuentas ellos son comunistas y se entienden.

El gobierno, según la lógica de estos "revolucionarios", cuenta con un solo líder y los demás son lacayos y operadores del sistema, por eso lamento que estos psuvistas declinaran en sus aspiraciones, ya que las amenazas que les hicieron una vez, las seguirán recibiendo cuantas veces les venga en ganas. Estos politiqueros si no ganan, arrebatan, y pasarán coleto con los "que intentan liberarse". Así será, no lo duden.

La carrera política no es pa´pendejos, ni pa´culillúos; tampoco para los que utilizan el terrorismo de Estado para obtener decisiones favorables; éstos últimos siempre terminan huyendo o tras las rejas.

Lamentablemente los concejales se entramparon; salir de las garras del terror no es fácil y da pena decir que los engañaron como a unos carajitos, pues si ellos están incursos en delitos contra la cosa pública, tal cual como lo ratificaron las ediles Vielma y Gil en la sesión de instalación, sepan que esos delitos no prescriben. Este grupo del chavismo pudiera considerarse el arma letal a ser usada cada vez que se requiera, por lo que la libertad de los subordinados está en sus manos.

¡Pena y vergüenza ajena!

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Fuente: El Norte