El día 22 de mayo se celebró en todo el mundo Día Internacional de la Diversidad Biológica, establecido por la Organización de las Naciones Unidas, con el objetivo de aumentar la comprensión y la conciencia sobre estos temas, además de sensibilizar y educar a la ciudadanía, en aspectos relacionados con la diversidad biológica mundial, coincidiendo además con que este año 2010, es también el Año Internacional de la Diversidad Biológica. En diciembre de 2000, la Asamblea General de las Naciones Unidas instituyó esta fecha para conmemorar el día de adopción del texto del Convenio sobre la Diversidad Biológica realizado en el año 1992, acuerdo internacional suscrito por Venezuela en la Cumbre de la Tierra, celebrada en Río de Janeiro y posteriormente ratificado por nuestro país en 1994.

Vale la pena destacar que en ese mismo año 2000, entró en vigencia en Venezuela la primera Ley de Diversidad Biológica, producto de un inconmensurable esfuerzo de de múltiples instituciones y personas, iniciado en 1995 con el impulso de la Comisión de Ambiente de la extinta Cámara de Diputados, entonces presidida por el hoy Gobernador del Táchira César Pérez Vivas y con el invalorable apoyo del entonces Conicit, de Fundacite Aragua y del Parlamento Amazónico. La ley desarrolló claramente los propósitos y compromisos plasmados en el mencionado Convenio de Diversidad Biológica, es decir el conocimiento, la conservación y el aprovechamiento sustentable de la biodiversidad. Esta ley ha sido sustituida por la ahora vigente Ley de Gestión de Diversidad Biológica.

La diversidad biológica, también conocida como biodiversidad, término utilizado como una abreviación de diversidad biológica (en inglés biological diversity), expresa la variedad o diversidad del mundo biológico, vale decir la variedad de seres vivientes de cualquier procedencia, se que provienen de ecosistemas terrestres o acuáticos, así como también incluye los sistemas ecológicos a los que pertenecen estos seres vivos; se dice además que también comprende la diversidad que existe dentro de cada especie, entre las distintas especies, y entre los diferentes ecosistemas. La conservación de cada uno de sus componentes, permite alcanzar el equilibrio ecológico, fundamental para la vida en la tierra.

Venezuela sigue siendo considerado uno de los diez países del mundo con mayor diversidad biológica, de la que se ha podido conocer, puesto que hay especies y componentes de la biodiversidad que aún no han sido descubiertos por la ciencia. Por ello resulta fundamental una política estatal coherente, que permita darle cumplimiento a los compromisos adquiridos por Venezuela en el Convenio de Diversidad Biológica y que ejecute de manera irrestricta, los mandatos establecidos en la vigente Ley de Gestión del la Biodiversidad.

Esta dirección electrónica esta protegida contra spam bots. Necesita activar JavaScript para visualizarla

http://lucasriestra.spaces.live.com/