Un fantasma recorre el mundo. . . Es el fantasma del populismo autoritario, de izquierda y de derecha.

Ha resurgido la terrible conducta de hombres que se creen predestinados, providenciales para gobernar a sus países sin cortapisas, sólo siguiendo sus caprichos y deseos. Suerte de mesías político que están convencidos que sólo con su voluntarismo pueden resolver todos los problemas de sus países. En las redes sociales han aparecido personas que preguntan ¿votaría usted por Nayib Bukele? Presidente del Salvador ha tomado una serie de medidas efectistas y populistas en su país que encandilan a muchos y le han dado una gran popularidad.

Desde luego este país tan golpeado por la guerra civil, la guerrilla, la corrupción, el atraso y atormentado por el control que ejercen las bandas del crimen organizado llamadas maras, cuando algún hábil político intenta resolver algunos de los problemas, aunque sea aplicando medidas inadecuadas, la población siente un alivio aunque sea momentáneo. Bukele ha decidido enfrentar a las maras, con las que se dice que tuvo pactos en sus tiempos de alcalde, y para ello ha sometido a toda la sociedad a un estado de excepción, en el que cualquier ciudadano puede ser detenido a discreción de los cuerpos policiales. Este se ha prolongado en el tiempo,hay muchos detenidos, algunos han sido liberados después de meses de presidio porque han resultado inocentes. Todo este plan con el fin de eliminar a las maras. Existen muchas denuncias de violaciones graves a los derechos humanos, detención de periodistas y amenazas contra medios de información.

Las medidas populistas tomadas por Bukele persiguen el objetivo de hacerse reelegir como presidente del Salvador, empero, la Constitución del país lo prohíbe taxativamente, por lo que ha logrado defenestrar a las autoridades electorales, así como a los Magistrados de la Corte Suprema de Justicia, para imponer su voluntad de ir a una reelección que la carta magna prohíbe, sin que nadie puede impedírselo. Desde luego esto constituye un grave atentado contra la institucionalidad democrática de cualquier país, que un hombre se crea por encima de las leyes. Ya lo hizo también el sátrapa Evo Morales en Bolivia, sólo que le salió mal, de tal manera que no se trata de izquierda y derecha, el autoritarismo es nefasto sea de cualquier ideología o credo. Es asaz conocido que Bukele ha sostenido que no se trata de una reelección, sino que le preguntará al pueblo si lo quiere nuevamente de presidente, la típica añagaza de todo autoritario, apelar al pueblo genérico para salirse con la suya.

Conversando con el historiador, el Dr. Agustín Arzola Castellanos sobre el peronismo, un autoritarismo basado en el fascismo y apoyado por los izquierdistas argentinos, afirmaba que en América Latina existe una especie de tara política, que hace que los pueblos sigan a este tipo de caudillos autoritarios, que terminan conculcando los derechos fundamentales de todo el pueblo, y comparto esa opinión. Estos autócratas terminan por crear más problemas que los que pretenden resolver. Hay que combatir decididamente cualquier tipo de autoritarismo.