Estos días han sido turbulentos. Colas que crecen exponencialmente, la crisis del sistema de salud y la escasez de medicinas se han agravado, los precios siguen en alza y los sueldos bajando.

Mientras, Maduro perdido en su mundo surrealista junto con tribus políticas y cuadros militares que lo sostienen. La comunidad mundial mira asombrada, y los medios internacionales mueven sus reporteros hacia Venezuela tratando de entender el Macondo del siglo XXI.

Esta grave situación pareciera presagiar un pronto desenlace. Es por ello que cada ciudadano debe poner su granito de arena para hacer posible una transición democrática, porque una salida pacífica y constitucional no está garantizada.

¿Por qué insistir en focalizar esta lucha en la democracia? Porque hay quien sostiene que el problema es económico y social, desestimando la fuerte deriva autoritaria del Gobierno. Las necesidades son tantas que están dispuestos a respaldar a algún militar que ofrezca plomo al hampa y comida. Esto es un error fatal.

El chavismo ha levantado un sistema político injusto y atrasado. Ha construido un orden político y social de desigualdades y exclusiones, donde si te juras chavista, o tienes amigos o familiares enchufados, tendrás acceso a bienes y quizás hasta te enriquezcas. Es un régimen para minorías bien ubicadas, en un país de treinta millones, con más de 75% en pobreza.

La democracia, aunque imperfecta, busca asegurar la igualdad ante la ley, incluyendo al Presidente y sus seguidores. Nada de la indignidad de aceptar bolsas de comida como un favor de poderosos. Nada de la indefensión ante los abusos policiales o del mandamás armado. Nada de esta impunidad y falta de derechos esenciales. En un país pobre, la oportunidad de que te toque algo de las dádivas gubernamentales, viviendas, taxis o becas, es escasa.

Esta crisis debe aprovecharse para dejar el camino que llevamos y convencernos de que solo con democracia se puede superar en paz y justicia la situación que padecemos. Es hora de incorporarnos a un frente común, con partidos y organizaciones sindicales, empresariales, gremios, academias, universidades y ciudadanos de a pie, para luchar por el referendo revocatorio como mecanismo democrático para superar esta situación.

@MLopezMaya


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