Hay un abismo gigantesco entre las aspiraciones de la sociedad civil y las ambiciones de la MUD.

El pueblo venezolano exige salir de Maduro ya, para comenzar a resolver de la crisis. Pero los dirigentes de la MUD andan retrasando los tiempos y haciendo cálculos absurdos, para ver quién se queda con el mejor camarote del Titanic.

Los partidos políticos promueven un revocatorio porque es un mecanismo que sirve para pedir dinero y para construir maquinaria; pero es evidente que éste no se realizará hasta diciembre, si es que al Régimen le da la gana de permitirlo.

Capriles y compañía están tan ciegos por la ambición, que no son capaces de sentir el sufrimiento y la desesperación del pueblo venezolano; aunque todos los días circulan imágenes espeluznantes sobre el hambre y los saqueos. Es obvio que mucho antes de diciembre se producirá un estallido social.

La Asamblea Nacional podría salir de Maduro en apenas horas, por el tema de su nacionalidad colombiana, promulgando el proyecto de decreto que les hizo llegar el Dr. Enrique Aristeguieta Gramcko, conocido ya popularmente como el “Decreto Gramcko”. Sin embargo, por algún inexplicable motivo, no lo hace o no se atreve; a pesar de que cuenta con el apoyo mayoritario de la población para actuar.

Capriles opina que “Maduro no abandonará el poder solo porque le pidan una partida de nacimiento”. Pero si la AN destituye a Maduro por su nacionalidad colombiana, se producirá una crisis política que lo sacará de Miraflores. Algunos dicen que no conviene hacerlo, porque entonces Maduro disolverá la Asamblea. ¿Y es que acaso no la está disolviendo ya? ¿Cuántos días de vida le quedan a la AN si no reacciona?

Es bueno que los diputados opositores lean el documento suscrito por un grupo de altos oficiales retirados, que cuenta con amplio respaldo de militares activos (disponible en este enlace http://bit.ly/201hSHK). El texto expresa un apoyo incondicional a la Asamblea Nacional para que cumpla con su deber de remover a Maduro por su condición de extranjero. Pero también contiene una clara advertencia: Si la AN no destituye a Maduro, estaría cometiendo un delito, por avalar la usurpación de la Presidencia de la República.

Esperemos que la Asamblea Nacional se ponga al lado de la sociedad civil, y ejecute el mandato que se le dio el pasado 6D. De lo contrario, la crisis barrerá no solo con el gobierno, sino también con la oposición.

@LuisSemprumH