Tú, el voto y Venezuela
Escrito por Antonio Barreto Sira | @BarretoSira   
Martes, 21 de Abril de 2015 01:16

Firma: Antonio Barreto Sira
Candelariazos
Tú, el voto y Venezuela
Sí lo sé. Muchos de ustedes están cansados de las elecciones, están hastiados de la forma grosera como el Gobierno intenta constantemente de burlarse de la voluntad general del pueblo.
Sí lo sé. En ocasiones las palabras no bastan, los discursos son tediosos y las promesas vacías.
Existen oportunidades que la desesperanza ahoga nuestras capacidad de raciocinio, en muchas horas somos presas de la jauría de la desilusión que nubla nuestra visión del presente y del futuro.
Sí lo sé. Todos nosotros deseamos un cambio total y absoluto de la realidad que vive el país. No obstante ese cambio sólo se logrará dejando a un lado el peso de la apatía, dejando atrás el desasosiego y emprendiendo una posición  de acción.
Para las venideras elecciones parlamentarias cada uno de nosotros tendrá su experiencia particular con su voto y con Venezuela.
Sé que han escuchado en miles oportunidades sobre la debilidad del gobierno, aunque en esta ocasión esa aseveración toma cuerpo ante la debacle social, política y económica que ha protagonizado un régimen que perdió el norte.
Así como el fenómeno de la izquierda bolivarista colmó a América de un pensamiento que se apoderó de muchas naciones, de esa misma forma estamos en presencia del desmoronamiento de ese ideal.
Vemos que en Bolivia las fuerzas de la democracia han ganado espacios en importantes departamentos, hace a escasas horas de escribir este artículo el movimiento PRO en Argentina, de clara oposición al kirchnerismo, venció en ciudades emblemáticas.
Las calles de Brasil y Ecuador se abarrotan de brasileños y ecuatorianos que buscan un cambio. Este es el momento que los venezolanos le demos al oficialismo la derrota más aplastante que hayan vivido.
Cada uno de los venezolanos tenemos que meditar nuestro voto, pensar sobre la escasez, el desabastecimiento, la inseguridad, la inflación, y darle un castigo a los responsables, que no son otras sino los enchufados de cuello rojo.
Tú, que me lees y conoces la crisis que se padece día con día, tú que vives la situación de abandono de nuestros hospitales, que tienes que hacer colas eternas e ir al mercado según el término de tu cédula de identidad, ahora es el momento de cambiar al país.
Esto no son palabras huecas, son las realidades que vivimos en esta hora en nuestra nación.
El madurismo sabe que su única balsa de salvación radica en la desmovilización de los millones de venezolanos que no aguantan más la situación del país, buscan la abstención del pueblo a través del miedo, la represión y la intimidación.
La abstención, la apatía y el desdén son las mejores armas de aquellos que desean seguir en el Gobierno destruyendo el presente y el porvenir de nuestra tierra.
Ante esta pretensión, y todas las acciones que deslealmente emprenden desde Miraflores, debemos decirle sí a Venezuela y escoger los mejores representantes, los más leales y comprometidos, para ser candidatos de la Unidad y así vencer gallardamente a quienes nos han sumergido en este caos.
Tú, con tu voto tienen un deber con Venezuela. Tú, eres la pieza esencial para la gran transformación nacional. Eres parte del cambio y del mañana, y ese mañana tenemos que edificarlo hoy.
Sí lo sé, sé que han llegado a un punto de la desconfianza, pero también sé que poseemos, juntos, la fuerza suficiente para ser mejores y para ayudar a nuestro país.
Sí, juntos lo haremos realidad.

altSí lo sé. Muchos de ustedes están cansados de las elecciones, están hastiados de la forma grosera como el Gobierno intenta constantemente de burlarse de la voluntad general

del pueblo. 

Sí lo sé. En ocasiones las palabras no bastan, los discursos son tediosos y las promesas vacías. 

Existen oportunidades que la desesperanza ahoga nuestras capacidad de raciocinio, en muchas horas somos presas de la jauría de la desilusión que nubla nuestra visión del presente y del futuro. 

Sí lo sé. Todos nosotros deseamos un cambio total y absoluto de la realidad que vive el país. No obstante ese cambio sólo se logrará dejando a un lado el peso de la apatía, dejando atrás el desasosiego y emprendiendo una posición  de acción. 

Para las venideras elecciones parlamentarias cada uno de nosotros tendrá su experiencia particular con su voto y con Venezuela. 

Sé que han escuchado en miles oportunidades sobre la debilidad del gobierno, aunque en esta ocasión esa aseveración toma cuerpo ante la debacle social, política y económica que ha protagonizado un régimen que perdió el norte. 

Así como el fenómeno de la izquierda bolivarista colmó a América de un pensamiento que se apoderó de muchas naciones, de esa misma forma estamos en presencia del desmoronamiento de ese ideal. 

Vemos que en Bolivia las fuerzas de la democracia han ganado espacios en importantes departamentos, hace a escasas horas de escribir este artículo el movimiento PRO en Argentina, de clara oposición al kirchnerismo, venció en ciudades emblemáticas. 

Las calles de Brasil y Ecuador se abarrotan de brasileños y ecuatorianos que buscan un cambio. Este es el momento que los venezolanos le demos al oficialismo la derrota más aplastante que hayan vivido. 

Cada uno de los venezolanos tenemos que meditar nuestro voto, pensar sobre la escasez, el desabastecimiento, la inseguridad, la inflación, y darle un castigo a los responsables, que no son otras sino los enchufados de cuello rojo. 

Tú, que me lees y conoces la crisis que se padece día con día, tú que vives la situación de abandono de nuestros hospitales, que tienes que hacer colas eternas e ir al mercado según el término de tu cédula de identidad, ahora es el momento de cambiar al país. 

Esto no son palabras huecas, son las realidades que vivimos en esta hora en nuestra nación. 

El madurismo sabe que su única balsa de salvación radica en la desmovilización de los millones de venezolanos que no aguantan más la situación del país, buscan la abstención del pueblo a través del miedo, la represión y la intimidación. 

La abstención, la apatía y el desdén son las mejores armas de aquellos que desean seguir en el Gobierno destruyendo el presente y el porvenir de nuestra tierra. 

Ante esta pretensión, y todas las acciones que deslealmente emprenden desde Miraflores, debemos decirle sí a Venezuela y escoger los mejores representantes, los más leales y comprometidos, para ser candidatos de la Unidad y así vencer gallardamente a quienes nos han sumergido en este caos. 

Tú, con tu voto tienen un deber con Venezuela. Tú, eres la pieza esencial para la gran transformación nacional. Eres parte del cambio y del mañana, y ese mañana tenemos que edificarlo hoy. 

Sí lo sé, sé que han llegado a un punto de la desconfianza, pero también sé que poseemos, juntos, la fuerza suficiente para ser mejores y para ayudar a nuestro país. 

Sí, juntos lo haremos realidad. 











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