La revolución comunista, esa, la de la autocracia militarista, la del Socialismo del Siglo 21, decidió apretar el acelerador a fondo, independientemente que en el camino queden regados sus restos. Es una acción absurda que pagaremos todos sin excepción. Al mal gobierno, a las mentiras, a la inseguridad, a las violaciones sistemáticas tanto de la voluntad popular como de la constitución, ahora se suma un país alborotado y que no dejará la calle, hasta que se resuelva una situación que nadie sabe, hasta hora, como resolverla. Lo que sí es cierto, es que tendremos dos alternativas, la primera, el milagro que todos esperamos y que caiga del cielo la solución, la segunda, sacarlo por votos en diciembre del 2012, que algunos consideran no apropiada, olvidando que en diciembre del 2005, la abstención nos coloco en esta disyuntiva.

Entre pitos, flautas y medianoche, el gobierno aprobó la Ley Orgánica de Educación (LOE) y sin consultar al pueblo, degolló a la propiedad privada. La Ley de Tierras Urbanas, acaba con las inversiones familiares y empresariales, la ocupación del predio sin que medien avisos judiciales y la obligatoriedad de vender al estado, colocan una camisa de fuerza al inversionista. Aunque reculó en apariencia en aprobar la controvertida ley de medios, el principal articulado lo deslizó en la refutada LOE, la cual será protagonista de importantes cambios en la ciudadanía.

Todo esto que está sucediendo en Venezuela, se supo al instante en el mundo debido a las nuevas tecnologías comunicacionales, que han permitido a los ciudadanos sin diferencia de clases, estar enterado de los acontecimientos sociales, económicos y políticos que acontecen minuto a minuto en el país, así como la posibilidad de participar en las actividades en las que se siente identificado.

La presente década, ha permitido a un número indeterminado de venezolanos, hacer uso de novedosas tecnologías para comunicar sus mensajes o recibir información que podría serles de utilidad. El uso de teléfono celulares con videocámaras, mensajes de texto y de voz, correo electrónico y la posibilidad de navegar en internet, otorgan herramientas a sus usuarios hoy, esenciales.

Si la telefonía celular ha alcanzado estándares de alta tecnología, es elemental referirse a los computadores personales y su desarrollo en apenas cuatro décadas. Internet ha contribuido con el desarrollo tecnológico comunicacional de punta y, esto ha sido en muy pocos años si tomamos en consideración que el protocolo HTTP (protocolo de transferencia de hipertexto) y el protocolo HTML (lenguaje de marcado de hipertexto) para navegar por las redes a través de híper vínculos, se creó en el año de 1990 dando origen a la World Wide Web (www). Es necesario señalar que internet es una red de redes y su conexión está asegurada sin importar si uno de sus enlaces falla.

Lo que hoy conocemos como Red, tuvo su origen en la Agencia de Investigación de Proyectos Avanzados (ARPA, sus siglas en inglés), un organismo creado en 1958 por el Departamento de Defensa de Estados Unidos, como respuesta al avance tecnológico soviético, en particular, el lanzamiento del Sputnik, primer satélite en órbita. Esta red, en su origen, de comunicaciones militares, debería resistir un ataque nuclear. El concepto de esta red se basa en un sistema descentralizado, de manera que pudiera seguir funcionando aunque se destruyeran a uno o varios equipos. En el año 1971 se desarrolló un nuevo medio de comunicación: el correo electrónico.

Es necesario tener un conocimiento básico de las nuevas tecnologías comunicacionales debido principalmente al objetivo del régimen actual, de silenciar la libertad de expresión, cerrando emisoras radiales, canales de televisión y amedrentando a los comunicadores sociales, con el propósito de que sólo comuniquen lo que al gobierno le interesa. Internet se ha convertido hoy en día, en la más poderosa herramienta comunicacional en el planeta. Se demostró cuando el autocrático régimen iraní controló el acceso a internet y los mensajes, fotografía y videos caseros de quienes reclamaban un proceso democrático y transparente, fueron esparcidos por el mundo. Ojalá el régimen venezolano no copie el mal ejemplo del régimen de Irán.


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